sábado, 19 de septiembre de 2020

Review La Tienda: Hoy no fío, mañana…tampoco.

 

Antes de entrar en materia con el post de hoy, debo confesar que el clima televisivo del 2020 me produce física pereza de escribir. No solo por la escasa calidad de lo presente (reencauches incluidos), sino también porque, en esta ocasión, es sobre un producto de RCN, ese canal ultrasensible a las críticas, que solo te vive censurando tus contenidos en YouTube (motivo por el cual este video solo se publicará en Vimeo), aun si se trata de un programa con toda la pinta de no comerse las 12 uvas en diciembre para despedir a tan tenebroso año.

Digo lo anterior, porque este es otro de esos productos kamikaze que estrena RCN enfrentado al rey del rating por inercia, Sábados felices. Y lo hace a sabiendas de que no le producirá ni cosquillas. Las cifras de sus primeras emisiones así lo atestiguan. Y mira que han intentado de todo en ese horario: Concursos (Gana con ganas), realities (Masterchef Celebrity 2019), Dramatizados (Por siempre Joan Sebastian, Luis Miguel), retransmisión de telenovelas propias, incluso el fémur de El Show de Las Estrellas en su desembarque desde el Uno con destino al canal de las tres letras y ni con eso han vencido al ladrillo de La Floresta.

La Tienda tampoco lo va a lograr. Y eso es una realidad, ya que tiene todas las de perder: Es demasiado ordinario este concurso para ser rival de peso, incluso al decadente formato de dizque humor de Caracol. Tiene una ambientación que haría palidecer de vergüenza ajena hasta al set del Chavo del ocho ( y eso que ya no se emite en Latinoamérica, lo cual debió producirle un aneurisma a los directivos de programación de RCN).

Milton Lopezrrubia, en su personaje de Cónsul, salido de El Man es Germán, es el presentador metido a empellones en esta labor, sin tener el mas mínimo mérito para ello (sí, hacer personajes estúpidos a lo largo del programa no cuenta como mérito). Vamos, el spin-off de lo que de por sí fue el spin-off de una telenovela ordinaria y sin talento como lo fue Las detectivas y el Víctor. Con él, otros personajes de ese sainete de medio pelo hacen parte del staff del concurso, donde cuatro tenderos se disputan seis rondas de pruebas bastante estúpidas para acumular tiempo y llenar luego un carrito con los productos que deseen, y premios como una moto y dinero en mejoras para sus respectivas tiendas.

·        Entre risas: Con “humoristas” como Alerta/El Cuenta Huesos (que viene siendo como un Rey Midas a la inversa, porque programa que toca, lo vuelve mierda). Por cada respuesta errada, pierden tiempo.

·        Lo que vendo: Los participantes, con los ojos vendados, deben tocar unas piezas de papel con cuatro letras, para poder contestar

·        El que no oye consejos no llega a viejo: Ven un video sobre sostenimiento del negocio y quien responda acertadamente, se lleva 20 segundos más de tiempo.

·        El engalle: Mas preguntas pendejas. Si hay empate, deben sacar cuentas mentalmente mientras desgranan alverjas y el que acierte, se lleva la mejora en el negocio.

·        Sobre ruedas: Hacer una carrera por toda la tienda para buscar unos productos con unos stickers con los cuales ganar más tiempo.

·        A surtir: Deben traer 3 productos que les indican dentro del tiempo que tienen. Algunos productos tienen un sticker, que les permitirán llevarse una moto

El product placement de este programa es bastante lamentable: Familia, Nosotras, Davivienda, Postobon, Carey, Bary, Jabon Ak-1… Y lo es porque el programa es tan fino como una morcilla y exuda clase como las nalgas de Yina Calderón.