Lo sé todo…menos hacer un programa decente

Tras casi 5 años de la salida del aire de Sweet,  el dulce sabor del chisme, Canal Uno pretende volver a tener programa de chismes propios, y ante el fracaso de Venga le cuento, uno de sus magazines de su nueva etapa iniciada en agosto pasado, se lleva a Ronald mayorga a la dirección y a Sara Uribe en la conducción de Lo sé todo, el nuevo producto con el que pretende competir contra la consolidada franja “realitera” de La Floresta y la invisible competencia de las Américas. Pero Uribe no está sola: se unen a ella Diana Montoya, mujer curtida en radio, “El gordo” Ariel y Marbelle.  Pero si ya era pesada la gritería de Guerreros, ellos no se quedan atrás.  Uribe y Marbelle salen vestidas por el peor enemigo. Nada inusual en ellas. Sara Uribe debería entender que es el propio “cable de plancha”: No sirve ni para radio ni para televisión.

La verdad, ese esfuerzo sobrehumano de hacer noticia con las ficticias noticias del pseudoreality del Uno se ve demasiado postizo. Ya lo han hecho en la Perubólica con Esto es guerra. Ni en eso son originales. Si con eso pretenden subir sus paupérrimas cifras, están en nada. Hasta Magaly Medina era más innovadora… ¿En serio es un chisme saber a quién le renovaron contrato en Guerreros? ¿O a quien eliminó fulanita de un grupo de Whatsapp? ¿O las fotos del romance de Maluma, que las ha visto hasta José Feliciano?  <grillos.mp3> Qué pena, este país NO es Puerto Rico ni Wapa TV debe ser el derrotero a seguir.

La sección de la “Mesa del cuchicheo” se vio super ordinaria. Solo chismes intrascendentes como la pelea de custodia de Buxxi. El mismo estilo de notas telepornomiserables que pasan en La Red. Y los comentarios de Marbelle caen en saco roto, porque el padre de su hija ya no existe para defenderse. La nota sobre Dora Cadavid retirada en un ancianato me pareció fuera de lugar, no fue tratada con el debido respeto que una actriz de su talla se merece. Y menos si  la nota que le sigue es el rumor sobre si la intrascendente Valentina Lizcano es o no lesbiana  (que de otra parte, no me interesa en lo más mínimo) o su afán de generar escándalo.

Diana Montoya hizo aparición con el tema de Claudia Morales y su polémica columna. El típico chisme “enmochilado” que utilizan como gancho del programa cuando se nota que el mismo no da más de sí. Llegó faltando 15 minutos para el final del programa, con una comunicación vía teleconferencia.  Montoya creo que se quedó en el lugar común de lo que muchos hablaríamos, sobre todo por el tema de la sospecha de saber quién era “Él”, motivo por el cual creo que debemos dar por cancelado ese tema. Claudia Morales está en su derecho de guardar silencio sobre el nombre de “Él”. Para quienes hemos sido víctimas, nuestro duelo es lo que es y como decidimos hacerlo. Y ya. No diré más sobre ello. Cerró el programa con titulares como el retorno de Dania Londoño, los conflictos sucesorales de Diomedes Díaz y sobre el presunto maltrato a Adriana Betancourt ¿A alguien le importa eso? ¿en qué año estamos, en 2012?

El resultado de todo este batiburrillo de cosas se saldó con solo un punto de rating. Lo habitual del Canal Uno ¿Así piensan competir, siendo aún más mediocres -si eso cabe- que Caracol y RCN?